lunes, 15 de octubre de 2012

VOLVIENDO A LA INFANCIA


Os  voy a hablar de la única manifestación folclórica infantil en el TEATRO, los títeres de cachiporra.

Cuando los comentamos en la clase de Literatura me recordaron a un “teatro de marionetas” que hubo en mi colegio cuando yo acababa la etapa de Educación Infantil, tengo un trozo de la obra grabada y os la he colgado, siento que no esté entera pero es suficiente para ver algunas de sus características reflejadas en ella.

Os la pongo porque me resultó tan familiar lo que nos estaban explicando, que parecía que me estaba contando aquella obra de títeres que vi cuando era niña y que la profesora no pudo ver para contarme tantas coincidencias.

Antes de nada, os diré lo que son para que lo podáis entender mejor:

Antiguamente hacían representaciones anunciadas, iban con un carro por los diferentes lugares para su representación. Al principio se hacían con palos y ahora se hacen de plástico.

En el guión principal se cambia los personajes pero no los roles.

Siempre podemos encontrar: El protagonista, el antagonista y el objeto de la discordia à con esto se forma la historia.

Primero se presenta el protagonista: “Soy Panchito” luego a su objeto o persona a la que quiere (Princesa) y empatiza con los niños. Por algún motivo se tiene que ir y viene el malo y roba lo que quiere,  el público llama a “Panchito” y le dice que se lo ha llevado, entonces comienza un diálogo con éste.

- ¿Por dónde se ha ido?
- ¡Por allí!
- ¿Dónde esta?
- ¡Arriba!

Panchito con la ayuda de los niños vence al malo, le pega con la cachiporra y salva a la princesa, en muchas ocasiones el malo suele arrepentirse y pide perdón, para resolver el conflicto se pregunta de nuevo al público:

- ¿Le perdonamos?
- Siii (o) nooo
- ¿Qué hacemos?


Aquí os dejo el vídeo:


1 comentario:

  1. ¡Qué vídeo más chulo! Me encanta que mis clases remuevan recuerdos en vosotras. Anotado también.

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